Arrullo a la muerte
Llega
septiembre y yo me sigo apagando
sigo
ocultando las velas para que dejes las sombras
y de
repente, te vas
y de
repente, no existo
cuando intentando huir de tu olvido
me he topado
con mi ausencia
y esta vez
ha dolido más que la tuya
es aún más
agria
más lúgubre
es como
abrir un féretro
y
hallarme
Quite tu
mano de mi pecho,
era yo quien
sangraba
mientras yo
sostenía el arco
tú enterrabas la flecha
éramos
buenos actuando
huyendo del espejo
que asustado
no me reconocía
Y yo te oía
lejano
como el eco
de tu huida
“cierra los
ojitos,
y deja esos
miedos de par en par”
que bonito
se escuchaba
con esa
caricia ronca
con ese
arrullo a la muerte
Llega
septiembre y sigo rasgando
asustada
temerosa
la mejor
nota que ha tocado mi piel
porque mi
reflejo me extraña
y yo también.